La alantoína es una sustancia humectante ampliamente utilizada en la industria cosmética. Es más, se halla presente en una cantidad enorme de fórmulas antiaging, hidratantes y regeneradoras, entre otras. Gracias a esta propiedad humectante, la alantoína incrementa la hidratación de las capas superficiales de la piel, lo que a su vez proporciona otros muchos beneficios derivados. En este artículo vamos a profundizar más y más detalladamente en las diferentes propiedades de la alantoína. ¿Preparada?

Qué es la alantoína

Lo primero es conocerla bien. En concreto, la alantoína, conocida científicamente como 5-ureidohidantoína y como glioxildureída, es una sustancia química nacida como consecuencia del metabolismo de las llamadas purinas pimidinas. Aunque se encuentra presente naturalmente en el cuerpo, la utilizada en la cosmética se obtiene principalmente de plantas como la manzanilla o la consuelda. En algunos casos, en marcas que no limitan sus fórmulas a los ingredientes naturales, puede ser incorporada sintéticamente.

Para qué se usa la alantoína

Como ya hemos apuntado antes, la alantoína es un compuesto químico que, en el organismo humano, posee una función humectante. En otras palabras: permite que las capas superficiales de la piel retengan más agua y en consecuencia se muestren más hidratadas. Esto, a su vez, genera otro efecto secundario positivo: que la función barrera de la piel se repara y se fortalece. De ahí que los usos de la alantoína sean tan amplios y extendidos en la industria cosmética. Proporciona mucho a los consumidores por muy poco.

Además, la alantoína también promueve la regeneración celular, una función fundamental para combatir los síntomas del envejecimiento celular. De hecho, la alantoína es especialmente relevante para tratar las pieles secas y las pieles deshidratadas. Pero no solo eso. Por último, la alantoína también aporta propiedades tanto calmantes como antiirritantes, lo que la convierte en una sustancia cosmética ideal para las pieles sensibles. Si notas tirantez y tu barrera cutánea está de capa caída, te vendrá de perlas.

Beneficios de la alantoína

Hemos hablado de los múltiples beneficios de la alantoína para la piel. Sin embargo, la alantoína también te puede aportar mucho en términos de cabello. De hecho, una de sus principales virtudes es que proporciona un poderoso efecto anticaspa. Por eso es tan común encontrar este ingrediente en la fórmula de muchísimos champús. Si tienes este problema, deberías probar una temporada con un champú con alantoína. Quizá sea el aliado definitivo que necesitas en tu lucha contra la descamación y la caspa.

La alantoína en cosmética

Ya has comprobado cuantísimos beneficios tiene la alantoína para el ser humano. Por eso no es extraño que se pueda encontrar en todo tipo de productos cosméticos. Desde crema de alantoína a sérums de alantoína y pasando por bálsamos labiales, mascarillas, desodorantes, limpiadores faciales y muchos otros más. Existe muchísimo donde elegir. Aquí mismo, en Isséimi: tenemos muy en cuenta las propiedades de la alantoína. Es una habitual de nuestras fórmulas más avanzadas. ¿No te lo crees?

Alantoína en crema

Pues no tienes más que echar un vistazo a la ficha de nuestra crema ELITE. A fin de cuentas, se trata de una crema revolucionaria que, además de factor de crecimiento epidérmico, factor multihidratante, aloe vera y vitamina E, contiene alantoína. Juntos, todos estos ingredientes conforman una fórmula hidratante, de gran efecto antiaging y regenerante inmejorable. Confía en los buenos ingredientes naturales. Ahí está la clave.