¡Tu carrito está actualmente vacío!
ÚNETE A NUESTRA COMUNIDAD
Suscríbete a nuestra newsletter y estate al día de todas las novedades de ISSÉIMI.
Cuando entrenamos o salimos a correr buscamos un espacio para hacer deporte y olvidarnos del resto del mundo. A ninguno se nos ocurriría forzar más de lo recomendado o realizar ejercicio de una forma imprudente por las fatales consecuencias que podría desencadenar. Sin embargo, pocos nos acordamos de proteger algo tan básico como son los cuidados de la piel. El entorno en el que se entrena y las consecuencias del deporte pueden afectar a nuestra piel. Al sudar, los poros se abren, eliminan toxinas y nuestra piel se deshidrata. Por eso es muy importante conocer los consejos básicos sobre cómo cuidar la piel después de hacer deporte. Siguiendo las siguientes recomendaciones podrás lucir sano tanto dentro como por fuera.
Sé que parece un paso obvio, pero en muchas ocasiones vamos con prisa o llegamos tarde a casa y las circunstancias nos hacen plantearnos si sería una mejor opción optar por rociarte spray corporal y cambiarte de ropa. Si te preocupas por los cuidados de la piel esto no debería ser ni siquiera una posibilidad. De hecho, entre el ejercicio y la ducha deberías esperar al menos diez minutos. El mejor momento es después de haber realizado los estiramientos y descansado brevemente, cuando el cuerpo ha vuelto a su temperatura corporal normal. El sudor humedecerá tu ropa y quedará pegada a la piel, lo que favorece los daños corporales como el acné, además de aumentar las posibilidades de coger un resfriado.
Además, las duchas con agua caliente no son buenas tras practicar deporte. Lo mejor para cuidar la piel después de hacer ejercicio es ducharse con agua fría o, en su defecto, tibia. De esta forma los poros se cerrarán y estimularemos el riego sanguíneo. Aunque una ducha caliente sea lo más apetecible, sobre todo en invierno, se resecará la capa externa de la piel.
Para poder curar la deshidratación de nuestra piel durante el entrenamiento es importante contar con una buena crema hidratante. Lo mejor es optar por los productos de un buen laboratorio cosmético natural que nos garantice la recuperación de nutrientes de la piel de todo nuestro cuerpo. Además, es muy importante hidratar también el rostro. Antes de nada, debes tener en cuenta que es muy importante no hacer deporte maquillada, de hecho, deberías llevar siempre toallitas desmaquillantes para asegurar que tu rostro está bien limpio antes de comenzar el ejercicio. Tras la ducha encontrarás el momento perfecto para una buena limpieza facial: leche limpiadora, sérum, mascarillas o al menos agua micelar, ayudarán a cuidar la piel de tu rostro tras el esfuerzo físico.
Al hablar de cómo cuidar la piel después del deporte no podemos olvidarnos del cuero cabelludo, ya que también se ve resentido tras el ejercicio físico. Para empezar, lo más aconsejable es llevarlo lo más natural posible, es decir, sin lacas, fijadores ni cremas para peinar. Además, si lo llevas recogido sufrirá muchos menos daños. Cuando llegues a casa o te duches, debes lavarlo con agua fría y utilizando un champú hidratante, que también podrás encontrar en un laboratorio cosmético. De esta forma conseguirás un cabello nutrido y con brillo. Así, se estimula el riesgo sanguíneo y evitarás la acumulación de grasas en el pelo.
Además, no olvides que los cuidados previos también son muy importantes. Si vas a entrenar en exteriores y te preocupas por los cuidados de la piel, debes aplicarte crema solar, incluso cuando creas que esta nublado o que no haría falta. Tampoco olvides usar ropa cómoda y transpirable, ya que así evitarás que la humedad se acumule en tu piel, evitando las impurezas. Ahora que sabes cómo cuidar la piel después de hacer deporte, no olvides seguir todas estas recomendaciones para que luzca como nueva.